Huancayo de piedra

Un viaje en bus rumbo a la incontrastable ciudad de Huancayo, un trayecto largo y tedioso, una de las primeras experiencias como periodistas… Fuimos cuatro hombres buscando empezar algo que vamos a seguir el resto de nuestras vidas, algo que nunca terminará, el amor y el seguimiento por el fútbol.

Llegamos a esta ciudad ubicada a 3259 msnm, nos dimos cuenta de lo que es la altura, provecho a los jugadores. Un buen desayuno para seguir con el recorrido. Esperamos fuera del Hotel Turismo, donde se alojaron los jugadores de Universitario, con la intención de robarle algunas palabras a los futbolistas cremas, fue imposible debido al resguardo policial que mantuvo siempre el orden impidiendo el acercamiento de la gente hacia los protagonistas del evento a realizarse.

Las entradas al estadio costaban más de 30 soles, motivo por el cual el coloso deportivo no se llenó. Había mucha gente fuera del Estadio Cuarto Centenario. Lo que sí se llenó fueron los techos de las casas, muy buena vista, 15 soles la entrada, los dueños hacían su negocio y todos contentos. Allí vendían cerveza, canchita, tortas, etc. Las personas disfrutaban su cotejo mientras se agasajaban con los manjares locales ¿Para qué más?

Hablamos con los hinchas del Sport Huancayo y todos estaban seguros de que su equipo ganaba este partido, así fue. “Wanka” en quechua significa “piedra” y “yuq” quiere decir “el que posee o el que tiene”, entonces Huancayo es “El lugar de la piedra”. El equipo con tan sólo 2 años de fundación superó al gigante de más de 85 años de antigüedad.

La pelota era la piedra de los verdes y siendo Huancayo “El lugar de la piedra”, los dirigidos por Cristóbal Cubilla no se la dejaron arrebatar y salieron airosos siendo tan duros y fuertes como esta. Un gol del paraguayo Carlos Alvarenga a los 78´ puso cifras definitivas al encuentro. Justo en ese momento estábamos fuera del estadio esperando ingresar por la famosa “segundilla” el gol se escuchó y todo Huancayo celebraba, los vendedores se abrazaban con los policías, todo era felicidad.

Después de tal hecho se hizo gala a la “segundilla” que es el ingreso gratis de los que se quedaron afuera por diferentes motivos. Se suele hacer faltando 5 minutos para el final o algo más. Dicho y hecho, abrieron las puertas del escenario y las personas corrieron inmediatamente a alcanzar un asiento. Nosotros hicimos lo mismo y fue ahí donde sentimos lo que es correr en altura, que bárbaro.

Cansados llegamos a ver los últimos 5 minutos, el estadio estallaba, la gente alentaba sin cesar buscando darle algo más de fuerza a su equipo, gritaban “Huancayo, Huancayo”. El árbitro Roberto Mauro finalizó el cotejo y la algarabía invadió a los espectadores. Final del partido, Sport Huancayo 1 - Universitario 0.

Salimos del estadio entre la placidez del público y nos dirigimos al terminal para regresar a Lima luego de la aventura que fue estar la ciudad ubicada en medio de un valle entre las cordilleras occidental y central. Sport Huancayo ahora está en zona de Copa Libertadores, a 2 puntos de Universitario, sueña con el título y todo esto en su primer año en la Máxima División del Fútbol Peruano, ¡Vaya equipo de piedra!